Paola Ituarte
14 de septiembre. Ana María Guzmán Sánchez, una de las madres de familia que estuvo dentro de la escuela Ricardo Flores Magón durante el enfrentamiento con la sección 22 del magisterio, lamentó que las corporaciones policiacas no hayan intervenido en los hechos violentos.
Ante un grupo de padres que participaron en la defensa de la primaria y maestros de la sección 59, quienes arreglaban el terreno que usarán como sede alterna, Ana María dijo que “más que temor es la impotencia de que nunca se aparecieron, la policía nunca llegó, nunca había nadie atendiendo teléfonos…”
La inconforme reconoció que previo a la manifestación de la sección 22 se prepararon para resistir un posible enfrentamiento, en el cual llegarían hasta las últimas consecuencias pues según su decir, no defendían las instalaciones sino la educación de sus hijos.
“Nos defendimos fue con palos, con piedras y con gasolina que teníamos y echábamos las botellas… cada quien estaba consciente de lo que hacíamos… era nuestro derecho de defender a nuestros hijos aún a costa de nuestra propia vida”, dijo.
En la defensa de la primaria participaron padres de familia y ex alumnos de la institución, lo que explica la presencia de adolescentes lanzando bombas y rocas.
Finalmente Ana María refirió que el grupo de aproximadamente 70 personas que atacaron desde el interior de la primaria, se rindieron ante la falta de provisiones y el agotamiento físico que les dejaron 2 horas de enfrentamiento.
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