Sistema Radiofónico Informativo

EDITORIAL. La polémica regulación de la marihuana

SRI-8

12 de marzo. Este jueves el pleno de la Cámara de Diputados aprobó el dictamen por el que se expide la Ley Federal para la Regulación del Cannabis, la cual legaliza el consumo, el cultivo y la comercialización de la marihuana con fines lúdicos y recreativos.

El dictamen, que incluye también diversas reformas a la Ley General de Salud y al Código Penal Federal, fue aprobado en lo particular por 250 votos a favor, de los legisladores de Morena, Movimiento Ciudadano, PT, PRD y PVEM, 163 en contra y 14 abstenciones, pero regresará al Senado debido a que los diputados realizaron cambios sustanciales a lo aprobado en octubre del año pasado.

La iniciativa amplía de cinco a 28 gramos la cantidad de marihuana que una persona puede portar y permite la posesión de hasta ocho plantas por domicilio, así como la creación de asociaciones de fumadores, las cuales podrán tener hasta 50 plantas.

La aprobación de la mencionada iniciativa generó una intensa polémica entre quienes estaban a favor y quienes se oponían a ella; cada una de las partes tenía argumentos aparentemente válidos.

Sus defensores aducen que la legalización de la marihuana ha tenido efectos favorables en países donde su uso lúdico es permitido, entre ellos que se han reducido la estigmatización, los estereotipos y la discriminación de los consumidores; argumentan que es menos dañina que otras drogas legales como el alcohol y el tabaco, y que su consumo no genera adicción ni dependencia.

Así también señalan que ayudará a descongestionar el sistema judicial, pues las policías, los fiscales y los jueces se concentrarán en los delitos de mayor impacto social como los asesinatos, los feminicidios, las desapariciones, la violencia intrafamiliar y de género, y que se reducirán los índices de violencia relacionados con el narcotráfico.

Quienes están en contra citan estudios científicos que indican que los fumadores habituales de marihuana tienen 20 veces más riesgo de desarrollar cáncer de pulmón que los de tabaco; que esta droga sí genera adicción e incluso dependencia física; que produce efectos síquicos y causa daños cerebrales, pero también afecta el aspecto social, pues los consumidores pierden gradualmente el interés por el estudio, el deporte, las actividades y las amistades sanas, presentan inestabilidad laboral y en muchos casos llegan a experimental una sensación de vacío existencial.

Finalmente, ponen en duda que con la entrada en vigor de la nueva legislación realmente disminuya la violencia relacionada con el narcotráfico, pues advierten que si la producción y tráfico de marihuana pudiera llegar a ser menos redituable, la delincuencia organizada buscaría compensar sus ganancias de otra manera, lo que puede reflejarse en el aumento del tráfico de otras drogas, principalmente las sintéticas, así como de los secuestros, las extorsiones y el cobro de “derecho de piso”.

En éste, como en muchos otros temas, existen argumentos encontrados cuya validez no se puede establecer de manera tajante y objetiva, porque depende fundamentalmente del criterio y de la formación de cada persona.

Lo cierto es que no es un tema menor, y que sólo con el tiempo podremos saber si las reformas legales recién aprobadas serán beneficiosas o si el remedio resultará peor que la enfermedad.

Lo que está fuera de toda duda es que, más allá de las leyes, de las campañas contra las adicciones, del entorno social y de cualquier otro factor, nada sustituye a la formación que se recibe en el hogar.

Sólo si en el seno de las familias se inculcan valores y se fomenta la cultura de la responsabilidad, del respeto, del cuidado de la salud, tendremos niños y jóvenes alejados de las adicciones, respetuosos de la ley y de los demás, lo que se traducirá no sólo en la disminución del consumo de sustancias nocivas, sino también de otro tipo de conductas como la violencia contra los menores y las mujeres.

La verdadera y única transformación de la sociedad está en el seno de cada familia.

error: ¡Contenido Protegido!