Para la mayoría de las familias salir de vacaciones significa un inversión pesada y forzosa, haciendo que una experiencia que debería ser relajante y divertida se convierta en un mar de cuentas y preocupaciones. Por eso aquí les dejo una lista de ideas que podrían hacer de sus vacaciones en familia algo mas relajante y disfrutable.
- Temporada baja. Este es un clásico. Si viajas en temporada baja ( mayo-junio, septiembre- noviembre ) las tarifas aéreas y hoteleras son menos caros. No necesariamente “más baratos” pero si menos caros.
- A veces las grandes cadenas hoteleras valen al pena, pero muchas veces en lugares muy populares (como las playas) vale la pena buscar hoteles más pequeños, hostales o bed&breakfast, pero para garantizar que son buenos, decentes y limpios usa sistemas de búsqueda en internet o un buen agente de viajes. Las sorpresas desagradables viajando no son recomendables.
- Planea tu presupuesto. Eso de viajar con “cartera libre” es lo peor que puedes hacer porque gastarás de más. Averigua precios, y tarifas previamente y con base en esos datos elabora un presupuesto de estancia, diversiones, transportes y alimentos. Considera un 20% de margen de error.
- Usa los Todo Incluido. Hay de todos los rangos de hoteles TI. Desde 2 estrellas hasta 5 diamantes, así que decide cuanto puedes gastarte esta vez y elige. En un todo incluido difícilmente gastarás en otras cosas. Es muy bueno para “mantener en cintura” el presupuesto.
- Un buen agente de viaje puede ayudar más de lo que te imaginas. Mucha gente los evita por las “comisiones” pero la verdad es que tu no las pagas, y si es bueno realmente puede ayudarte a ahorrar tiempo en el viaje, dinero y contratiempos.
- Se flexible en fechas y horarios. Muchas veces unas horas antes o días después las tarifas son mejores.
- Aprovecha los pases de todo el día para diversiones, trenes, museos etc.
- Dale a cada niño su “presupuesto” de gasto. Nada de que piden y piden. En todo el viaje se pueden gastar X y así ellos irán decidiendo en que gastan y en que no.
- Pon el tiempo a tu favor. Las escapadas de imprevisto son divertidas, pero es más barato reservar con anticipación e incluso te da tiempo de juntar el dinero de tu viaje sin recurrir al crédito.
- Si vas de descanso, ¡aléjate de las zonas de tiendas y shopping!. Ojos que no ven, cartera que no gasta.
Fuente: Blog & Lana